El pasado viernes se llevo a cabo la clínica de batería, impartida por Elohim Corona de Moderato.
“Más que una clínica yo vine aquí a demostrar el gusto de tocar este instrumento. Porque más que tocar rápido o fuerte, la batería es parte de mí. Cuando mi papá ensayaba con su banda, aunque el baterista era malo, me impactaba el sonido de la batería. Toda mi vida —llevo 31 años de baterista— ha sido rockear, y estoy muy feliz de seguir tocando”, afirmó Elohim.
Y así lo demostró en su visita a Tampico, donde compartió información y conocimientos con los jóvenes y niños de la región.
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